Villajoyosa, población costera de gran belleza. Su casco antiguo amurallado está bañado por las aguas del río Amadorio, y su panorámica presenta un paisaje muy pintoresco de casas pintadas de vivos colores. Las fachadas de las casas fueron pintadas así para que los marineros que llegaban a sus costas reconocieran fácilmente la población. Villajoyosa es conocida también por sus fabricas de chocolates. 
Seguimos nuestra excursión hasta Altea, uno de los pueblos más bonitos de la Costa Blanca. En Altea veremos el casco antiguo con sus casas blancas, sus calles empedradas y angostas llenas de carácter, su iglesia blanca con techo azul, y unas vistas increíbles desde la plaza, desde donde contemplaremos el mar y las montañas.
Almuerzo.
Por la tarde visita a Benidorm, es el gran centro turístico de prestigio en la Costa Blanca por la cantidad de recursos que ofrece, por la variedad de su oferta de ocio, por la calidad de sus hoteles, entre otros motivos. Y por supuesto también por su clima y sus playas.
A la hora indicada regreso.